Las etapas del duelo
¿Cuáles son las etapas del duelo? ¿Y qué le sucede al cerebro después de un duelo? En el ensayo Luto y melancolía, Freud expuso su teoría del duelo, distinguiéndolo de la depresión y planteando la hipótesis de que éste se desarrollaba en tres fases: negación, aceptación y desapego.
En cambio, veamos a continuación las 4 fases del duelo que J. Bowlby reconoció y describió en 1980:
fase deslumbrante
fase de anhelo
Fase de desesperación y desorganización.
fase de reorganización.
La fase deslumbrante
Ocurre unas horas después de la muerte y dura hasta una semana. Consiste en ese momento de incredulidad y conmoción que se produce tras la muerte de un ser querido, una especie de letargo y embotamiento general que uno siente al sentir y actuar. Este entumecimiento puede verse interrumpido por arrebatos de ira y dolor. La persona:
puede parecer aturdido
parece incapaz de aceptar la noticia
pueden ocurrir ataques de pánico.
La fase de anhelo
Poco a poco la persona empieza a darse cuenta de lo sucedido y así pasa a la fase de investigación y anhelo. Esta fase puede durar unos meses, a veces años. Lo que sientes es una profunda sensación de desorientación por la pérdida de un punto de referencia en tu vida. En esta fase pueden estar presentes:
dolor fisico
ansiedad
insomnio
inquietante.
Estados de ánimo alternos que van desde la aceptación de la pérdida hasta la imposibilidad de creerla. Luego viene la ira. La persona enojada experimenta un sentimiento de impotencia hacia quien se considera responsable del suceso: el destino, o incluso hacia la propia persona que ha desaparecido.
Lo que se hace en esta fase es perseguir la memoria del difunto guardando su ropa y mirando las fotografías. Pueden ocurrir 2 fenómenos:
ataques frecuentes de llanto
ilusiones sensoriales.
Sólo cuando aceptas que la pérdida es permanente, la ira desaparece y la tristeza se apodera de ti.
proceso de duelo
Karolina Grabowska – Pexels
La fase de desesperación y desorganización.
La tolerancia al tormento emocional te permitirá, poco a poco, hacer el duelo. Si la persona que tiene que hacer duelo es capaz de dar rienda suelta a sus sentimientos y dar voz al sufrimiento que siente, entonces el duelo tendrá un resultado positivo.
Sin embargo, puede ocurrir que esto no suceda y que el proceso de duelo quede bloqueado en esta fase. La persona que es incapaz de dar voz a su dolor permitirá que éste permanezca dentro de él, complicando el proceso de aceptación de la pérdida sufrida.
La fase de reorganización
La aceptación del duelo se producirá paulatinamente y esto te permitirá pasar a la última fase: la redefinición de ti mismo y de la situación, que puede durar uno o más años. Hay 3 elementos característicos de esta fase:
la persona poco a poco va dejando atrás la angustia
Hay una recuperación significativa en la planificación.
Se presenta la capacidad de invertir en el futuro.
Las etapas del duelo variarán en intensidad y duración dependiendo de algunos factores:
Personal: por ejemplo, problemas de relación con la persona fallecida.
miembros de la familia: la complejidad de la historia familiar
Dependiendo de la naturaleza de la muerte: una muerte esperada o inesperada.
sociocultural: presencia de apoyo externo como una red amigable y social.